La era de la confrontación
Vivimos en la era de la confrontación. Los extremismos proliferan en la forma de posturas radicales irreconciliables. Una solución confiable, viable y sostenible nunca surge de los extremos en confrontación, sino del punto intermedio entre ellos. Pero, es cierto, para que haya un punto intermedio, debe haber extremos. Parte del problema radica en anular la toxicidad de los extremos.